Comunicado del CMC de Bs.As. ante la legalización de la interrupción del embarazo en la Argentina

Consorcio de Médicos Católicos de Buenos Aires

30 de diciembre de 2020

Comunicado del CMC de Buenos Aires ante la legalización de la interrupción del embarazo en la República Argentina

Como CMC de Bs.As. queremos expresar nuestro rechazo a una ley que siempre tiene una víctima: el niño por nacer. A través de la misma, se busca implementar y legitimar un proceder que determina que ante una situación de desigualdad de poder, indefectiblemente gana el más fuerte. El Niño por nacer no deseado siempre pierde y lo paga con su vida.

Lejos de ser una sociedad más justa, en la que la vida de todos sea considerada como el primer y fundamental bien a defender, hoy somos un país en el que prevalece más la injusticia, la desigualdad y la pobreza, no sólo material sino además la espiritual.

Por otro lado, como médicos también somos víctimas, ya que nuestra libertad e integridad profesional se ven amenazadas.

Como comunidad de médicos y además de médicos creyentes, queremos manifestarle a toda la sociedad que seguiremos trabajando todos los días de nuestras vidas por el respeto y la defensa de la vida humana. Seguiremos en esta noble y justa misión, contando para ello con dos poderosos instrumentos: la verdad y la fortaleza espiritual.

La verdad que se fundamenta en la dignidad humana inherente de cada niño nacido y no nacido, que deviene en el respeto y resguardo de su vida y de su integridad. Y la fortaleza espiritual enriquecida por nuestras convicciones más profundas y por nuestra fe.

Agradecemos por este medio a todos aquellos que se han manifestado en todo nuestro país en favor de las dos vidas, a los médicos y al personal de salud que se encuentra al frente de una pandemia histórica, a los miembros del CMC de Bs.As. que han sido voz de los que no tienen voz y a nuestra Iglesia que nos ha acompañado siempre.

Como CMC de Bs.As. hemos estado presente en todos los actos en que hemos sido convocados y tenemos la tranquilidad de conciencia del esfuerzo que no solo ha sido realizado, sino que fue hecho con inmensa alegría de corazón.

Por último, les queremos decir:

A los niños por nacer, que cuenten con nosotros.

A las madres que sufren por alguna causa, que cuenten con nosotros.

Al pueblo argentino le decimos también que cuente con nosotros cuando de dignidad y de vida se trate.

Virgen de Luján, amada madre nuestra que nos guiaste por este peregrinar, intercede ante el Señor por todo este pueblo argentino, que en su mayoría ama la vida.

Dra. Elena Passo

Presidente del CMC de Bs.A.

Dr. Fabián Romano

Vicepresidente del CMC de Bs.As

Dr. Alejandro Martínez Wagner

Secretario del CMC de Bs.As.

Fotografía tomada en la Marcha por la Vida del 28 de diciembre de 2020 en la Plaza de Mayo de la Ciudad de Buenos Aires.

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En la fotografía el Dr. Luis Durand manifestándose en favor de la vida en la Ciudad de Salta.

Dr. Luis Durand

Aquel, a quien recordamos en cada Navidad, nos plantea repensar nuestras vidas tanto en el plano personal como social…

El ser humano no se realiza en forma individual, siempre en forma grupal.

Independientemente de nuestras creencias religiosas, está estudiado que lo egocéntrico puede adoptar placeres del momento; en cambio nuestra buena integración con los demás, conduce a la felicidad plena.

Jesús, a quien recordamos en las navidades, nos propone “amar al prójimo”, y para quienes elijan ser creyentes, nos dice que en el prójimo debemos ver al Dios que no vemos materialmente.

Cada año tiene sus prioridades. Justamente en la Navidad del 2020, la sociedad argentina estará “debatiendo” si el estado promueve la interrupción de la vida de nuestros hijos por nacer. El eje del debate es si un ser humano, circunstancialmente no deseado, tiene derecho a vivir o no.

– No Transformemos una madre circunstancialmente vulnerable (por la angustia de enfrentar su embarazo, independientemente de su status económico), en una mujer vulnerable de por vida, por la angustia de haber interrumpido voluntariamente, o mayoritariamente presionada por su entorno, la vida de su propio hijo.

– No transformemos una sociedad que ayuda al indefenso, por otra donde predomina el deseo circunstancial de cada uno… los hábitos suelen ir in crescendo, los buenos y los malos.

– No transformemos la penalidad de la mujer vulnerable, hacia la penalidad a los médicos que buscan ayudarla; dejando impunes a quienes promueven y negocian con la “interrupción” de la vida de los hijos de esas madres.

-Sí valoremos a todas las mujeres, mucho más cuando ellas llevan el mayor tesoro de una sociedad, su continuidad. Está demostrado científicamente que cuando el ser humano es ayudado desde la concepción, es cuando mejor se desarrolla. La mejor ayuda es en sus etapas formativas, sea en el útero materno, o en el segundo útero: la familia.

¡Feliz Navidad en Familia!