AICA

  • 25 de noviembre, 2024
  • Buenos Aires
La Academia Nacional de Medicina otorgó su máximo galardón al referente en Urología de los hospitales Británico y Austral, quien fue presidente y vicepresidente del Consorcio de Médicos Católicos.La Academia Nacional de Medicina otorgó su máximo galardón anual, el Premio Hipócrates 2024, al doctor Alejandro Nolazco, por su trayectoria sobresaliente en la práctica clínica, la docencia y la investigación.

Académico de número desde 2012 y miembro de sociedades científicas internacionales, Nolazco fue hasta 2022 jefe de los servicios de Urología del Hospital Británico y del Hospital Universitario Austral (a los que sigue aportando su experiencia como consultor) y ha dictado cátedra de esa disciplina en las universidades Austral, Católica Argentina (UCA) y Loyola (Chicago, Estados Unidos).

Es también médico legista y en los últimos 24 años ha desarrollado un programa de asistencia médica y humanitaria integral a personas de las comunidades wichí, chorotes y tobas que viven en condiciones precarias en una vasta región del Chaco salteño.

Miles de consultas y cirugías Más de 1.200 médicos y un número similar de otros profesionales y voluntarios se sumaron a ese programa que realiza cada año cinco intensos operativos de varios días a jornada completa, que han atendido 85.000 consultas, realizado 1.700 cirugías abdominales y más de 500 cirugías oftalmológicas. 

“Nombramos a esta iniciativa AMTENA, que es un saludo wichí que significa: ‘Me alegro de verte otra vez’ -explicó Nolazco al recibir el premio-; para nosotros, Asistencia Médica Thomas Elkins Norte argentina, para honrar la memoria del doctor Elkins” (urólogo norteamericano del Hospital John Hopkins en quien se inspiró Nolazco por el servicio de ayuda humanitaria que desplegó en Ghana, Etiopía y Nigeria).

Por ese proyecto de ayuda profesional desinteresada y silenciosa en el norte argentino -que la Academia tuvo en cuenta al distinguirlo-, Nolazco ha sido además postulado para recibir el Premio Abanderados de la Argentina Solidaria del año 2024, patrocinado por el Grupo Clarín, Caritas y distintas organizaciones no gubernamentales.

Consorcio de Médicos Católicos

Casado desde hace 39 años con Segunda Uriburu, padre de seis hijos (dos de ellos urólogos, como su padre y su abuelo, José Nolazco, que fue un reconocido especialista), el médico premiado ha destacado en todo su accionar personal y profesional el valor de la familia y de la vida. Fue presidente y vicepresidente del Consorcio de Médicos Católicos, cuya comisión integra ahora como vocal y que lo ha felicitado declarando: “Es un médico de alma, en el cual la ciencia y el corazón están al servicio de Dios”.

Al recibir el premio, Nolazco agradeció a sus maestros del Consorcio, los doctores Carlos Carranza Casares, Hugo Obiglio y Carlos Ray. “Con ellos, y con todas las comisiones directivas, hemos reafirmado repetidamente que todos los médicos estamos llamados a cuidar, respetar y defender la Vida, desde la concepción y en todas sus etapas”. Y recordó a las Hermanas de Maria, del sanatorio Mater Dei que “con tanta generosidad, nos abrieron siempre el auditorio para nuestras reuniones”.

“Incansable defensor de la vida

El premio Hipócrates le fue entregado en un acto realizado el 14 de noviembre en la sede de la Academia, avenida Las Heras 3092, que abrió su presidente, el académico Miguel Luis Podestá. 

Al presentar al médico premiado, el secretario general, académico Pedro Antonio Saco, destacó su excelencia médica como referente en la urología argentina, su capacidad de liderazgo y su inacabable energía, al tiempo que su trato afable y respetuoso, su virtud de hombre íntegro y recto en su proceder, que lo califican como “un maestro, que ejerce su profesión con alegría, con conocimiento, con prudencia, en una palabra, con sabiduría”.

“Sus condiciones personales y su bondad, su increíble bondad, hacen reconocer en él a una persona dotada de un exquisito humanismo”. Y afirmó. “Debo remarcar que el doctor Nolazco es un incansable defensor de la vida desde el momento de la concepción que testimonia su compromiso en todos los ámbitos donde le toca actuar”.

Gracias a la familia y sus maestros

A su vez, el doctor Nolazco agradeció a sus padres y once hermanos, “con quienes aprendí los valores y virtudes de una gran familia cristiana”. También lo hizo con su esposa (“mi consejera incondicional”), sus seis hijos y seis nietos que “nos han engrandecido el corazón”.

Tuvo un recuerdo para los hermanos Maristas, del colegio Champagnat, que “sellaron en nosotros el amor a la Santísima Virgen María, el valor de los vínculos, la amistad y el deporte”.

Hizo una mención especial del doctor Ernesto Beruti y familia, por una fraternal amistad de 60 años, y evocó a grandes maestros de la medicina de los que tuvo el privilegio de aprender: los doctores Juan Manuel Gregorio, Carlos Sáenz, Miguel Podestá, Juan Carlos Esperanza y Leonardo Mc Lean

Hipócrates, humildad y sencillez

“Este Premio, que lleva el nombre del célebre “Padre de la Medicina”, Hipócrates de Cos -puntualizó-, nos recuerda los principios fundamentales de nuestra profesión: el enfoque ético del cuidado de los pacientes y el compromiso inquebrantable con el bienestar humano. 

Más adelante dijo: “Una reflexión de Hipócrates, que sigue vigente, nos recuerda que “la vida es corta, la ocasión fugaz, la experiencia engañosa y el juicio difícil”.

“Ésta nos confirma que la medicina exige humildad, modestia y sencillez, constancia y un profundo respeto por la humanidad. 

“Nuestra Patria que es el lugar que amamos, con un profundo sentido de identidad, y pertenencia, está atravesando una grave situación de crisis, que reclama unidad y compromiso de todos nosotros”.

“Tomemos conciencia de que nuestro servicio, por pequeño que sea, puede tener un impacto trascendental, para nuestro tiempo y las generaciones futuras”.

Y concluyó así su agradecimiento (en el que se emocionó más de una vez): “Todo hombre puede contar las semillas de una manzana, pero solo Dios sabe cuántas manzanas dará cada semilla. Esta metáfora ilustra lo impredecible pero profundo, de cada acción, muchas veces invisible, al que estamos llamados, todos, para lograr un gran país”.

Presencias 

En el mismo acto la Academia entregó otras distinciones, diplomas y becas por trabajos de investigación. En nombre de esos premiados, agradeció el doctor Wenceslao Villamil, de Urología, Cirugía Robótica y Oncología Prostática del Hospital Italiano de Buenos Aires.

Entre otros, asistieron al acto el ministro de Salud de la Ciudad de Buenos Aires, doctor Fernán González Bernaldo de Quirós (quien había recibido el premio Hipócrates en 2021); la presidente de la Academia Nacional de Ciencias de Buenos Aires, académica Damasia Becú de Villalobos, y la presidente del Consorcio de Médicos Católicos, doctora Elena Passo.