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Roma, Roma…
Roma, no es suficiente una vida…”Quien viaja a Roma la primera vez no
ve nada; en el segundo viaje comienza a conocerla, y en el tercero se la
lleva en el corazón” (Autor del siglo XVII).
• Todo comenzó aquí, en Roma, cabeza del mundo. Jamás una ciudad ha tenido una aventura tan maravillosa en la historia de la humanidad.
• Roma ha dominado por dos veces el mundo. Nació de un pequeño grupo de pastores y se transformó en la ciudad más conocida del mundo; dictó leyes y sobresalió con las armas y con la cultura por muchos siglos.
• Roma, después de su destrucción, encontró en la Cruz el nuevo centro para reinar. Sobre la tumba del pescador Pedro, que vino de Jerusalén, llegó a ser nuevamente la ciudad protagonista en el arte, la belleza, la religiosidad y en la fe. Su aventura es tan grande que hace desaparecer todo cuanto hay en ella de negativo.
• “Oh Roma, nobilísima, señora del mundo, que sobresales sobre todas las ciudades por la sangre “roja” de los mártires” (Canto de los peregrinos, siglo X).
• Gloria “a Roma, en la que Cristo es romano”(Dante, Divina comedia, Purgatorio XXXII, vers.102).
• “Roma, feliz. Por los méritos de Pedro y Pablo has llegado a ser espléndida en todo el mundo. Pedro y Pablo han dejado en Roma el testimonio de su ministerio y martirio; de ahí nace el empeño de los romanos de conservar en la Urbe su rostro espiritual y de cualificar cristianamente su fisonomía. A nosotros romanos, a nosotros cristianos, nos obliga defender su belleza moral” (Pablo VI 1972).
¡Roma, Roma! Es necesario girarla y girarla, perderse por sus calles, conocerla y amarla. Es difícil abrazarla, es muy grande.
¡ Roma! No es suficiente una vida.
YO HE VIVIDO EN ROMA 25 años, y vuelvo a saborearla. (Fiesta de los santos Apóstoles Pedro y Pablo, 29 junio)
+ José Luis Redrado
Secretario emérito del Consejo Pontificio para los Agentes Sanitarios (para la Pastoral de la Salud)